Exposición La Cuba que encontré (2015)
Desde que estuve, niña, en La Habana
no se me puede olvidar……
[Antonio Burgos]
Manuel Lama ha viajado a Cuba. Sin la prisa del turista, y con todo el arte de un fotógrafo consagrado. Se ha dejado llevar por sus pueblos, sus calles, por esos rincones que solo el sabe descubrir y que ahora comparte con nosotros en esta exposición.
Manuel es pintor de paisajes, arquitecto de interiores, cazador de miradas. Tiene la paciencia y el arte de hacer que momentos fugaces queden como estampas imborrables. Y se ha traído en la maleta lo mejor de la isla, lo que queda de revolución y lo que apunta a ser el futuro de un pueblo que queremos como hermano.
Pasear por Cuba es casi hacerlo por casa. Solo cambian algunos matices: un vapor a veces insoportable y la imprevisible lluvia del trópico; una gente que ama y siente la música y el compás; unos coches de antes del 59 que relucen con el señorío de entonces; un país, en suma, que se las ingenia para sobrevivir, y escribe su historia con toda dignidad.
Desde que estuve en La Habana no se me olvidan las calles, las plazas, los paladares y La Bodeguita, los timbiriches, mesas que con cuatro cosas encima ya son tienda, artistas que pintan el colorido de la isla o que tallan maderas que fueron nobles y acaban en llavero o abrecartas, casas viejas con mecedora, nevera y ventilador, retratos del Ché, escolares de uniforme, figurantes que posan esperando un dólar y siempre músicos. Cuba es un pentagrama del clásico son, del punto a la guajira….
Y todo esto y mucho más, nos muestra Manuel en esta selección. No es la Cuba de Fidel, ni la Cuba que vendrá. Magistralmente nos enseña La Cuba que encontró.
Joaquín Conde